Nah trang es como el salou de Vietnam. Excesivo ambiente turístico poco acorde con la esencia y el sabor de este pais. Garitos de americanos borrachos y cosas así... Fuimos a una discotequilla que hasta cierta hora frecuentaban sobre todo vienamitas, y verlos bailar y disfrutar regalndote sonrisas constantemente... Fue una delicia. Cada vez mas creo que los vietnamitas son la gente mas maja con la que me he cruzado hasta ahora. Me encantan.



El segundo día en Nah Trang, hicimos un viajecito en barco por las preciosas islas que salpican la costa. Fue una gran elección, extremadamente divertida y una razón mas para amar a esta panda de salaos. Nuestros anfitriones no tenían desperdicio, no paraban de sacarte cervezas y mientras surcábamos los mares la música del tío Bob Marley fue la banda sonora perfecta.
Una de las paradas era pAra hacer buceo en un arrecife... Fue la primera vez que lo hacia y me dejo bastante impresionado, la vida que hay alli abajo es algo increíble, y pensar q nos la estamos cargando.... En fin.
En un momento dado, el capitán y sus grumetes montaron un concierto improvisado en cubierta, fue de lo mas descojonante que he visto en mi vida, reímos como si lo fueran a prohibir. La guinda fue cuando me invitaron a cantar con ellos y me lancé a por aquel diminuto escenario cual ñu ávido de gacela tomphson. El tema a interpretar, como no podía ser de otra forma... La Bamba. Fue un momento tremendamente divertido e inolvidable. Hay vídeos de la actuación que pondré a disposiciones de ustedes, quridos lectores, cuando la vuelta al ogar materno me permita acceder a mis tan queridas como poco añoradas computadoras.
Por cierto, mama, a ti sí te añoro ;)





Después de tan divertido periplo, ya al anochecer, tomamos un sleeping bus en el que pasaríamos 12 horazas hasta alcancar nuestro próximo destino, Hoi An.
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Ubicación:Vietnam
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